martes, 28 de diciembre de 2010

El círculo

El círculo es uno de los símbolos más difundidos y conocidos, no obstante uno de los que usualmente es menos entendido y muchas veces infravalorado o malinterpretado.

Geométricamente hablando, el círculo es un conjunto de puntos en un plano que cumplen con estar equidistantes a un punto en el mismo plano, este punto es conocido como centro, mientras que la distancia es conocida como radio.

Consideremos primero esta descripción matemática, sobre esto hagamos una afirmación, que el centro sea la divinidad (Dios, Alah, Krishna, Gran espíritu, o como prefieras llamarle), entonces, quiere decir que todos los puntos que conforman el circulo están a igual distancia de la divinidad. Así entonces en cualquier punto del círculo esta igualmente distante de la divinidad.

Afirmemos ahora que los puntos del círculo son los espíritus de los seres del universo, esto querría decir entonces que todos los seres del universo están a la misma distancia de la divinidad.

Con estas dos simples afirmaciones podemos decir que una de las enseñanzas del círculo es que sin importar ninguna diferencia, todos los seres están a igual distancia de la divinidad, si consideramos a esta como un estado de vibración y conciencia infinita (matemáticamente el radio crece hasta el infinito), entonces tendremos que al momento de buscar el contacto con las fuerzas divinas todos los seres tenemos el mismo potencial de alcanzarla, por estar todos a igual distancia de la divinidad.

La conclusión anterior nos entrega un dato muy valioso, pues nos otorga el poder de contactar a la divinidad directamente sin necesidad de intermediarios, puesto que todos somos seres espirituales.

Podemos obtener una segunda conclusión, el círculo es un continuo, los puntos que la forman están todos unidos, por ello si consideramos a dichos puntos son los espíritus de los seres del universo, nos dice que todo ser en el universo esta en íntimo contacto con el resto a nivel espiritual, por ende en primer lugar nunca nadie esta solo, en segundo lugar lo que le sucede a uno afecta a todo el conjunto.

Psicológicamente hablando, el círculo representa la totalidad del ser psíquico, así entonces podemos relacionarlo con un estado de plenitud en el cual todo lo que sucede en nuestra psiquis esta integrado y forma parte de un continuo, sin bloqueos, el resultado de la unión de consciente, inconsciente y supraconsciente.

A niveles mágicos se habla mucho sobre el uso del círculo como una protección o como un contenedor de energía, si bien ambas afirmaciones son ciertas, es infravalorar el poder de este símbolo. La verdadera esencia y poder del círculo radica en su simbolismo antes descrito, cuando el mago se ubica en el centro del circulo, ocupa el lugar que es propio de la divinidad, esto quiere decir que reconoce el espíritu divino que habita en él y por ende su capacidad de ejercer su voluntad sobre el universo, es la afirmación de que es un ser espiritual con el poder otorgado por la divinidad misma de crear cambios en su universo.

Podemos ver otros tantos ejemplos de la importancia y simbolismo del círculo, por ejemplo que en el antiguo Egipto el Sol, dador de vida y luz era representado por un circulo. Igualmente la Luna presenta una apariencia circular en su fase de plenilunio. Incluso los antiguos astrólogos pudieron darse cuenta de que en su recorrido por el cielo los planetas y estrellas van trazando un círculo.

El círculo es un símbolo que representa a la divinidad en su primera forma manifiesta, el principio de la creación de los mundos se ve representado en él.
Círculo en la Magia

El círculo es un símbolo ampliamente usado en magia, su poder deriva de lo anteriormente dicho. Existen varias formas de usarlo, pero en este caso veremos la más común de todas.

Usualmente el circulo es trazado al inicio de un ritual mágico a un nivel energético (en ocasiones antes se traza físicamente también). El objetivo es delimitar un espacio ritual, con condiciones especificas.

• Al poseer forma circular evoca la conexión con lo divino, siendo un punto de conexión con las fuerzas espirituales.
• El espacio es impenetrable energéticamente excepto para las fuerzas llamadas a él.
• Actuar de contenedor de las fuerzas llamadas, evitando que se dispersen.

De estas tres funciones la principal es la primera, puesto que una operación mágica debe tener un vínculo con las fuerzas divinas.

Para el trazado del círculo se usa herramientas mágicas proyectivas o en su defecto tres dedos de la mano de poder para dirigir las energías sobre la tierra, demarcando así la figura. El símbolo en sí debe ser visto en color azul-plateado, con la firme convicción de que cumplirá con las características antes mencionadas.

En forma complementaria a la acción del círculo mágico se suele usar algunas conjuraciones para hacerlo más fuerte o en su defecto, invocarse algunos seres que sean capaces fortalecerle.

Se debe tener cuidado al operar dentro del círculo de no moverse más allá del límite de este, puesto que la barrera energética que este levanta al ser trazado es fácil de romper y puede provocar una grieta que haga que pierda en parte sus cualidades para las cuales es usado. En caso de pasarse a llevar dicho límite, no queda otra opción que volver a trazar el círculo y reanudar la operación mágica.

Existe una tendencia a abusar del círculo, en el sentido de usarlo en todos los casos, siendo que su utilidad es más bien para rituales mágicos y no algo que se debería usar con mayor frecuencia, si bien existen algunas personas que creen que cada vez que meditan deben trazar el círculo, grave error, pues es un uso poco consciente del símbolo, su poder, importancia y trascendencia mística.

martes, 21 de diciembre de 2010

Oráculos y Adivinación Parte 1

Si revisamos en la RAE hallaremos que:

oráculo.

(Del lat. oracŭlum).
1. m. Respuesta que da Dios o por sí o por sus ministros.
2. m. Contestación que las pitonisas y sacerdotes de la gentilidad pronunciaban como dada por los dioses a las consultas que ante sus ídolos se hacían.
3. m. Lugar, estatua o simulacro que representaba la deidad cuyas respuestas se pedían.


De esto podemos comenzar a analizar. Ante el primer punto podemos decir que el oráculo nos conecta con lo divino, es la respuesta de la deidad interior, la voz de la sabiduria y lo trascendente.
En el segundo punto reconocemos la presencia de una tercera persona, quien actúa como canal de comunicación entre la sabiduría y el consultante, siendo esa persona el oráculo.
En el tercer punto es donde hallamos los sitios dedicados a la adoración de deidades que otorgan su sabiduría, un ejemplo son los templos en la antigua Grecia, tales como Dódona y Delfos.
Podríamos decir, en términos más amplios, que el oráculo es la persona, que ha desarrollado en si la capacidad de contactar con su sabiduría interna y la de la naturaleza (y sus dioses) para poder dar un augurio, realizando la practica de adivinación.
Aquí entonces nos convendría definir que es adivinación. Este término viene del latín "divinatio", que significa "que viene de los dioses". Así entonces, podemos decir que la adivinación es la capacidad de desvelar los designios de los dioses, haciendo aquí la mención que puede tratarse tanto de los dioses de la naturaleza, los dioses de los hombres o la propia divinidad interior.
Existen muchas técnicas de adivinación disponibles para quien desea obrar de oráculo. Dafnomancia, aeromancia, tarot, runas, etc.... etc... etc... la clasificación de ellas es trivial, no existe ninguna mejor que otra, ya que la técnica es solo un punto focal para que el oráculo realice su acción. Las estériles discusiones sobre cual técnica es mejor solo son una evidencia del ego de quien practica una u otra, si bien, ciertamente, cada persona debe elegir cual es más afín a sus capacidades, intereses y sentir.


¿Como funciona la adivinación?

Todo se sustenta en el segundo principio hermético, de correspondencia "Como es arriba es abajo, como es abajo es arriba." de esto, deducimos que lo que lee el oráculo es información que se halla plasmada en los planos sutiles y que por acción de la corriente materializadora de energías ha de manifestarse físicamente. Así mismo, se nos muestra quienes somos interiormente, como nuestras fuerzas internas, a frecuentemente en pugna buscan expresarse en nuestra realidad física, hallamos en la adivinación un reflejo de nuestro mundo interno, de las necesidades de nuestro ser interno que buscan imponerse por sobre las necesidades artificiales que vienen del mundo exterior que nos bombardea diariamente de objetivos e ideas que no necesariamente son las que satisfacen nuestras necesidades, sino las de otros.
Los oráculos funcionan en base a símbolos, estos pueden ser universales, experiencias e imágenes presentes en el inconsciente colectivo, es decir, que son compartidas por todas la humanidad. Imágenes como el padre, la madre, nacer, morir, viajar, buscar, meditar, etc.
Existen otras imágenes que son propias de cada persona, creadas en base de su experiencia única, interpretables solo por la persona en cuestión.
En general, una lectura oracular presentará una mezcla de imágenes universales o arquetípicas y personales. Se requiere madurez, auto-crítica y años de práctica para poder diferenciar entre unas y otras y hacer buen uso de ellas durante una lectura oracular.

¿Que se puede obtener de un oráculo?
A través del uso de los métodos adivinatorios se puede obtener muchas cosas, según la habilidad, intención y orientación de quien realiza la lectura.
  1. Saber el pasado.
  2. Saber el presente.
  3. Saber el futuro.
  4. Entender las problemáticas de la mente y el alma.
  5. Reconocer nuestros potenciales y desarrollarlos.

¿Existen condiciones para la práctica oracular?
Se suele decir que para la práctica de la adivinación, que se debe tener "el don" o "ser especial", también se suele decir que se debe venir de una familia en que exista gente con habilidades para la adivinación. Todo esto es una mentira, no existe tal como gente elegida para realizar estas prácticas, toda persona posee la condición esencial que es la presencia de la divinidad en su interior.
Ciertamente existen personas con capacidades más desarrolladas, no obstante, con una formación adecuada, dedicación y práctica constante cualquier persona puede llegar a volverse un buen oráculo.
Quienes dicen que se requieren condiciones especiales suelen hacerlo por la necesidad de sentirse superiores "yo puedo, soy especial, tu no puedes, no eres especial". Además tienden a mitificar también en torno a condiciones como el cobrar por las lecturas, unos diciendo que no se debe, otros que se debe cobrar siempre, ambos extremos inadecuados. Cuando alguien solicita nuestra ayuda debemos prestársela en toda situación, no obstante, queda a nuestro criterio si a cambio pediremos una remuneración por ello, si bien no por la lectura en si, sino por el tiempo invertido en orientar a la persona, ya que el tiempo de cada persona es valioso y no debe dejar de ser compensado a menos que se desee dar esa dedicación como un obsequio.

lunes, 12 de abril de 2010

La Biblia de los Brujos

En este libro, los Farrar describen su propia experiencia formando parte de un coven wiccano de linea alexandrina, a cargo del mismo fundador de esta linea, Alex Sanders.
Cuentan ellos los principales elementos de la filosofía de los wiccanos, además de varios detalles de sus ritos y prácticas.
Se puede ver además en los prólogos como ellos se ven inicialmente impresionados por la sabiduría de Sanders, descubriendo luego que gran parte del conocimiento que entregaba provenía de otros autores a quienes este no les daba crédito debido.
Un texto interesante para quienes desean conocer una de las lineas más importantes dentro de la Wicca.

domingo, 4 de abril de 2010

Magia de las hierbas y piedras

¿Por qué usamos las hierbas? Por que las plantas contienen el poder de la naturaleza. El usar hierbas en nuestros rituales, hace que simbólicamente la naturaleza esté representada bajo la forma de las plantas y los árboles.

El uso de hierbas en magia tiene un origen chamánico hace ya miles de años, el hombre primitivo observó que los animales consumían ciertas hierbas para combatir problemas tales como infecciones intestinales y basándose en eso, comenzó a usarlas para curar. Con el paso del tiempo, tal vez guiado por la intuición o sueños, inició su uso en magia.


Con el paso de las edades, los conocimientos se fueron perfeccionando y agregando un gran número de hierbas al “Recetario Mágico”.


El uso de las hierbas no solo es representar a la naturaleza en los rituales, sino que también en canalizar mejor y más fácilmente nuestras energías, como efecto de la vibración que posee cada planta, por lo que su acción hace que sea más fácil elevar nuestras energías en el plano astral y a que estas se manifiesten en el mundo físico.

Las hierbas tienen diversos usos, normalmente más de uno por cada una de ellas, para saber cual se debe usar, se puede recurrir a diversos libros para ver los usos que se dan más comúnmente, pero sin por ello descartar, el factor intuitivo a la hora de elegir cuales usaremos en un ritual. Es importante que al preparar las hierbas estas sean impregnadas del propósito del trabajo, esto se hace habitualmente a través de una oración que indica cual es el propósito con el cual se preparan las hierbas, pidiendo a la divinidad que las impregne de su poder, y incrementando así su eficacia.

A su vez, también la forma en que se ocuparán y las cantidades, deben ser elegidas de acuerdo a la forma más práctica para prepararlas y las cantidades de que disponemos, de una manera que se sienta que esta correcta la proporción y el estado de agregación.

Es un comentario ampliamente distribuido y débilmente sostenido que existen ciertas plantas que pueden “traer mala suerte”, esto es erróneo pues en la naturaleza no existe el mal, la naturaleza sigue ciclos cósmicos de creación y destrucción en equilibrio, por lo que no es posible que existan plantas o animales que pudieran traer alguna clase de desgracia. Algo muy diferente es cuando intencionadamente son usadas sustancias naturales para provocar daño, tal es el caso de la magia negra.


De análoga manera se trabaja con piedras, estas según sus cualidades vibratorias, las que en parte dependen de su color, densidad y origen, podrán afectar los niveles vibratorios de nuestros trabajos. Como herramientas representan como es evidente el elemento Tierra, lo que se asimila a que son contenedores de energía (la Tierra como elemento pasivo, contiene energías de estados vibratorios superiores al del plano físico).


Las piedras pueden ser usadas para incrementar el poder de rituales, como para tratamientos energéticos, pudiendo complementarse ya sea con Reiki o usarse directamente a través de pociones o en combinación con hierbas. Es importante tener claridad de que piedra se esta trabajando, pues no deja de ser habitual que la gente confunda algunas de ellas debido a lo parecido de su color o apariencia.

lunes, 29 de marzo de 2010

Los ciclos naturales, Parte 3

La Luna, al igual que el Sol vive sus propios ciclos, de ellos podemos mencionar básicamente. Debemos recordar que la Luna representa las energías psíquico-astrales, por ende sus distintas fases van marcando los cambios que se dan en el plano psíquico y como estos afectan al ser humano en su cuerpo astral.



El primero es el conocido ciclo de las lunaciones, parte este en Luna Nueva, cuando esta se encuentra mostrándonos su lado oscuro, esta oscuridad, representa el "No Ser", el estado de no manifestación, todo es potencial, todo esta en la semilla sin haber esta brotado aún. Es un momento de introspección, meditación, un momento de ver nuestro interior, representa aquella parte de nuestra mente que no es bañada usualmente por la conciencia y por ende actúa sin que podamos saber sus motivos, la Luna nueva es nuestro inconsciente. Seguida a esta fase, que dura un día nos hallamos con la Luna Creciente, aquí se comienzan a manifestar los potenciales, tal como la luminosidad aumenta así mismo va creciendo la fuerza psíquica que impregna el aire, es un momento de expansión, de avance, donde es bueno comenzar los proyectos que han de desarrollarse hasta la siguiente etapa, la Luna Llena.



La Luna Llena, en contraparte a la Luna Nueva es el momento de mayor luminosidad, aquí la mente esta plena de energía y representa la faceta consciente de esta. La máxima energía en los planos psíquicos se encuentra en Luna Llena, tanta es que la gente suele estar muy enérgica esos días y no es de extrañarse que se aumente la cantidad de crímenes en dicha etapa, debido a esto es que antiguamente se hablaba de los "lunáticos" haciendo alusión a aquellos que se veían influidos marcadamente por la Luna Llena.



Posterior a esta, viene una etapa en la cual la luminosidad comienza a decrecer, la Luna Menguante, esta, representa el regreso hacia lo profundo y oscuro, el camino de regreso a la Luna Nueva, es una etapa de constricción, donde podemos avocarnos a aquello que deseamos dejar de "alimentar" dentro de nosotros, aquello a lo que le deseamos quitar energía en nuestra mente y con ello, librarnos de ese patrón. Por ser una etapa constrictiva, no es de extrañarse que las personas estén mas irritables en este periodo.



Un segundo ciclo que podemos mencionar para la Luna es su menos conocido recorrido por los signos del Zodiaco. Debemos recordar que la Luna, tiene su recorrido aparente por el cielo en la Eclíptica, por ende nos hallamos con que al igual que este, recorre uno a uno los signos del zodiaco, solo que pasa por los doce signos dentro de su periodo de 28 días, a diferencia del Sol que lo hace a lo largo de un año.



Dado que cada signo implica una forma de manifestación de las energías, al pasar la Luna de uno a otro cambia la forma en que la energía psíquica que proyecta se expresa, de este modo tendrá 12 formas de expresión de la energía a lo largo del mes, lo que sumado al ciclo de lunaciones nos da a entender que existe una amplia gama de formas en que la Luna expresa su energía a lo largo del año. Basta recordar que en un año hay 13 lunaciones, cada una con la luna recorriendo los 12 signos, esto, nos da una poderosa herramienta para sacar provecho a las energías que nos proyecta este astro en el desarrollo de nuestros procesos internos.

Tal como hemos hecho con el Sol y la Luna, es posible analizar con todos los otros planetas, hallaremos con que existe una amplia gama de opciones, todas las cuales nos llevan a una sola y única conclusión final, el universo funciona en base a patrones definidos, con una precisión increíble, esto sumado a los numerosos factores a contabilizar, implica que las combinaciones que se dan entre los ciclos de los planetas del sistema solar, sumado a las interacciones entre estos nos permiten comprender las energías que se dan en cada momento sobre la faz de nuestro planeta. Un analisis detallado de cada uno de estos aspectos es complicado para estas paginas, pero podemos dar al lector interesado el consejo de estudiar astrología, una herramienta tremendamente poderosa a quien esta en el sendero de desarrollo personal.


lunes, 22 de marzo de 2010

El gran libro de los rituales mágicos

El gran libro de los Rituales Mágicos (Modern Magick) de Donald Michael Kraig.

Bajo este rimbombante y bastante ridículo titulo (de la versión en castellano) nos encontraremos con un curso de magia ceremonial. La linea seguida por el autor es la de la Orden de la Aurora Dorada (Golden Dawn), es decir, ceremonial con matices rosacrucianos y egipcios.

El autor va sistemáticamente introduciendo las diferentes técnicas usadas por la Aurora Dorada en la formación de sus iniciados, haciendo hincapié en la dedicación y constancia requerida para pasar de un ejercicio al siguiente.

Se toma el autor también el tiempo de dar una corta (y en más de algún tema errada) introducción a la cábala, origen de la tradición esotérica de occidente, sobre cuya estructura fue creado el sistema mágico de la Aurora Dorada y otras instituciones iniciáticas.

Se destaca y agradece que el autor, al terminar cada capítulo entregue un listado de libros para profundizar lo tratado en este, haciendo mención a autores de gran seriedad en el esoterismo. Si bien se siente a momentos una falta de profundidad en los temas y una tendencia autoreferente en sus ejemplos y muchos de los grabados del libro.

Recomendado para aquellos que habiendo ya estudiado ya la magia natural y alcanzado una proficiencia en ella desean comprender la dinámica de las fuerzas de planos superiores inasequible a vías como la magia natural o muchas de las prácticas paganas habituales.

lunes, 15 de marzo de 2010

Hacer Magia

Hacer Magia de Edain McCoy

En este libro Edain McCoy, una pagana y practicante de magia se avoca a como desarrollar las condiciones necesarias para el trabajo mágico, partiendo desde ejercicios básicos, avanza hasta establecer los fundamentos necesarios para todo aquel que desee desarrollar la magia natural en la medida necesaria que esta le de un paso hacia la magia ceremonial.

Comienza con ejercicios de visualización y respiración, explicaciones sobre el sistema energético de los cuerpos sutiles, avanzando luego en el entendimiento de los elementos, estructura básica del ritual y mecanismos de la magia, abordando incluso elementos de la filosofía de la India como es el caso de los Tatwas y Chakras.

Una visión amplia, en que se lamenta a veces que en algunos puntos falte mayor profundidad en el análisis, no obstante de grata lectura y una muy buena base para todo aquel que desea comenzar a explorar los senderos de la magia.

lunes, 8 de marzo de 2010

Los ciclos naturales, Parte 2

Un ciclo anual que con los años fue siendo comprendido, analizado, pulido hasta llegar a nuestra actualidad, donde los neopaganos hablamos en la actualidad de 8 puntos que marcan la actividad solar en cada hemisferio. Dentro del neopaganismo hablamos de sabbats o fiestas del ciclo solar, cada una de ellas con un simbolismo propio y asociado a como la intensidad de la luz solar nos va afectando tanto en lo externo como en lo interno. Esta de más decir que tanto la naturaleza como el hombre alcanzan su punto de máxima ebullición en el verano, donde la actividad es total, mientras que en invierno, frio y contracción, la actividad disminuye al mínimo.

Comprendamos el ciclo solar. para ello, partiremos del más simbólico de los sabbats, aquel que ha sido usado por mayor cantidad de culturas como un símbolo místico, el Solsticio de Invierno.

Como sabemos, nuestro planeta se encuentra inclinado en 23º aproximadamente, por ende en su órbita en torno al Sol, la luminosidad cambia de un hemisferio al otro. El solsticio de invierno es cuando la luz solar en menor cantidad a un hemisferio, por estar alumbrando en ese momento con mayor intensidad al hemisferio contrario. Podemos decir, simbólicamente, que es el momento de mayor oscuridad en un hemisferio, el día de las sombras más largas. Así entonces, sumidos en las tinieblas del día más corto y la más larga noche, al surgir el Sol por el horizonte el día del Solsticio de Invierno, nos recuerda que incluso cuando estamos sumidos en las tinieblas del alma, no se trata más que de la antesala a emerger hacia la luz. Es la noche del solsticio la más extensa del año, pero posterior a ella, las noche se acortan y los días aumentan su duración. Es por esto que los antiguos asociaron este momento al resurgir de la luz y la esperanza, por eso, es que en muchas de las culturas antiguas, los redentores nacían en el Solsticio de Invierno, como símbolo que traían una nueva luz en medio de las tinieblas en que se sume la humanidad cíclicamente.

Puesto que el solsticio de Invierno se asocia al nacimiento, debe haber una etapa de lactancia posterior, esta se ve reflejada en el siguiente paso de nuestro ciclo, conocido entre los paganos como Imbolc, que representa la nutrición de la nueva forma, basándose en la protección dada por la figura materna, la madre cósmica nutre a sus hijos pequeños e incapaces de alimentarse por si mismos. Imbolc corresponde al punto medio entre el Solsticio de Invierno y el Equinoccio de Primavera.

Avanzamos aún adentrandonos en el Equinoccio de Primavera, Ostara, como se le conoce en el neopaganismo, aquí tenemos infancia, niños jugando, divirtiéndose, descubriendo el mundo que se muestra ante ellos, sorprendiéndose ante cada cosa tal como lo hicieron nuestros antepasados en épocas remotas. Sigue corriendo el reloj de la naturaleza hasta llegar al siguiente punto, intermedio entre el Equinoccio de Primavera y el Solsticio de Verano, este punto, conocido como Beltane, nos habla de adolescencia, de despertar sexual, la exploración de las capacidades reproductivas del cuerpo, pero a la vez de los placeres íntimos. La sexualidad está de fiesta, los cuerpos estan preparados para la creación de la siguiente generación que ha de nacer en el siguiente Solsticio de Invierno.

Llegamos al Solsticio de Verano, punto en que el Verano, la estación cálida llega a su punto más alto (aunque erróneamente, muchos crean que es el comienzo de la estación, tanto solsticios como equinoccios nos hablan del punto más alto de estas). Aquí los cuerpos estan plenos, es la madurez, la vitalidad es plena, aunque falta de experiencia que ira ganando con el paso del tiempo, el fuego interno arde, buscando nuevos desafíos, pasiones, experiencias más intensas. Los Campos rebosan en vida, la energía del Sol unida a las bendiciones de la Tierra nutren los cultivos. Cultivos que serán cosechados en Lammas, punto medio entre el Solsticio de Verano y Equinoccio de Otoño, Lammas es la primera cosecha, aquí los primeros frutos del trabajo son recogidos, la energía y madurez se compensan, ya no es tanta la vitalidad como antes, pero la madurez alcanzada permite invertir adecuadamente las energías para poder sacar mejores provechos.

Avanzamos hasta el Equinoccio de Otoño, la llamada segunda cosecha, aquí nos comenzamos a preparar para el Invierno que con su crudeza nos augura carestía, por ende, almacenamos comida, tal como el hombre, adentrándose en sus años, comienza a tomar previsiones para tener una vejez cómoda y digna. Vejez que ha de llegar el el siguiente ciclo y culminar en Samhaim (punto medio entre el Equinoccio de Otoño y el Solsticio de Primavera), que es la siempre presente muerte, toda persona tiene solo una certeza en la vida y es que morirá, en Samhaim muere el ser antiguo, siendo esta la tercera y última cosecha, muere el dolor cargado en los hombros, muere el pesar y los prejuicios, muere el hombre vulgar y básico, muere lo que ha dejado de ser útil, la muerte, con su pureza intocable nos quita de encima el peso de aquello que ya no tiene sentido conservar y nos abre el paso a una nueva vida, una encarnación nueva de nuestra conciencia en un vehículo adecuado a las nuevas condiciones que ha de afrontar. La bendita muerte nos libera y abre el camino a una nueva vida que surgirá en próximo Solsticio de Invierno.

lunes, 1 de marzo de 2010

La magia del poder Psicotrónico

La magia del Poder Psicotrónico de Robert B. Stone. (The magic of Psychotronic)

Aquí nos hallamos con un libro tremendamente util para el practicante de magia. Debemos recordar que la magia radica en la mente, desde ahí comienza a moverse, en "La magia del poder Psicotrónico" hallamos una serie de claves para ir desarrollando el poder de la mente mediante las técnicas de visualización creativa, como contactarse con la fuente energética universal y poner en marcha el poder que esta otorga.

El libro va estructurado de un modo gradual, partiendo con experimentos muy sencillos llegando a logros muchas veces considerados "sobrenaturales". Para cada caso entrega una serie de protocolos a aplicar que son una buena base para el principiante que necesita pautas claras que lo guíen en el desarrollo de sus facultades latentes.

Sin lugar a dudas un libro de cabecera, tanto para quienes desean descubrir sus potenciales ocultos.

lunes, 22 de febrero de 2010

Dos caras de la deidad interior

En la antigua Roma, los sacerdotes de Janus eran quienes supervisaban y daban el visto bueno a toda construcción, Janus, como patrono de los arquitectos, presidía los arcos. Se le representaba usualmente como teniendo dos caras, una mirando al pasado y otra al futuro, una mirando al este y otra al oeste, una en cada solsticio.

Al igual que Janus, nuestra deidad interior, aquella que se manifiesta en nosotros tiene dos caras, una de ellas, piadosa, encarnación de la misericordia, llena de amor, perdón, caridad, fraternidad, capaz de perdonar cualquier error, de amar sin importar el dolor, de dar hasta más allá de la razón, esa cara debemos cultivarla, perdonándonos de nuestros errores, amándonos por nuestras virtudes, dándonos a nosotros mismos para el bien de otros sin esperar nada a cambio, ocultos en las sombras ser un canal del servicio de esa deidad interna a nuestros hermanos que jamás han de saber que obramos por ellos. Ese "Dios de Amor" ha de vivir y glorificarse en nosotros cuando obramos en su nombre y bajo su inspiración.

La segunda cara, es la de la deidad castigadora, iracunda, tiránica, aquella que jamás perdonará la ira, las bajas pasiones, la ignorancia ni el miedo y les combatirá sin tregua, esa deidad tiránica combate todo pensamiento oscuro, todo pensamiento de culpa, temor, todo sedicioso acto del ego tratando de sojuzgar a otros, esa cara es la que nos purifica, la que purga de nuestra alma aquello que nos separa del universo, puesto que es solo nuestro ego lo que nos mantiene distantes de ser uno con todo el universo, cuando con la ayuda de esta faceta nos limpiamos de todo la malo y hemos llegado a amarnos plenamente por acción de la cara misericordiosa, estamos listos para comulgar con las altas esferas.

Cuando ambas caras, amor y disciplina están plenamente desarrolladas y en equilibrio, entonces el hombre es capaz de volverse uno con todo el universo, pues del equilibrio de estos dos polos surge una tercera manifestación, cuando estas facetas interactúan en equilibrio, generan una belleza tal que es capaz de despertar a aquella semilla de estrella que vive dentro de nosotros, ese átomo antiguo, esa partícula del principio del universo, que ha existido desde la noche de los tiempos y que mora en nuestro interior, cuando esa flor se abre y nuestro ser interno florece, formando el triángulo sagrado, entonces somos capaces de ser uno con el universo, moraremos en las estrellas, caminaremos en sendas antiguas ya olvidadas por los hombres y solo recorridas por los dioses, nadaremos con nuestra alma en las profundidades de los mares, seremos hermanos por derecho propio de todos ser viviente, las plantas nos cantaran y enseñaran sus secretos, las rocas serán transparentes mostrándonos los tesoros de la Tierra, nuestra alma se elevará por encima de lo mundano, para alcanzar aquello que solo hemos podido soñar y aún más cosas que jamás podremos llegar a imaginar siquiera.

Cuando las dos caras de la deidad interna se equilibren y florezca nuestro ser interno, dejaremos de ser "Hijos de los dioses", para pasar a volvernos dioses, reconociendo el legado que ha habitado en nuestro ser, aquello que somos desde que habitábamos en la insondable noche de los tiempos.

Ahora nuestro trabajo es arduo, aremos la tierra, saquemos malezas, preparemos todo para el próximo florecimiento de nuestra propia divinidad.

jueves, 18 de febrero de 2010

Los ciclos naturales, Parte 1

Existen, en nuestra naturaleza ciclos que son fácilmente observables, basta solamente poner algo de atención y vamos descubriendo como los seres vivos se guían por ellos, así hicieron nuestros antepasados en épocas remotas y su comprensión les dió un poder tal que les permitió avanzar en el desarrollo de sus civilizaciones.


Es ampliamente sabido, que en el antiguo Egipto se observaban los ciclos de crecida del Nilo, que daban la base para la agricultura y que en torno a este se forjó una de las mayores civilizaciones de las que tiene registros históricos la humanidad. La naturaleza, nuestro planeta por entero, se rige de acuerdo a patrones, cada vez que el hombre ha logrado descorrer el velo del misterio y ha entrado en comprensión de estos ha dado un paso en la evolución de su conciencia, ya que entender la naturaleza es entenderse a si mismo.


Para el hombre primitivo, sumergido en un mundo salvaje, lleno de criaturas mucho mejor equipadas que él para defenderse y alimentarse, observar los fenómenos de la naturaleza era un constante de venir de fenómenos maravillosos, aterradores y caóticos, bastaría hacer memoria a nuestra propia infancia para recordar la primera vez que vimos un rayo y escuchamos un trueno, la mezcla de fascinación ante su belleza, temor, ansiedad, proyectemos esto a un ser primitivo, donde todo era desconocido en su origen y funcionamiento.


Como primera medida para entender la naturaleza, el hombre supuso que estaría regido espiritus de naturaleza ignota que eran los regentes de los fenómenos que le rodeaban y sorprendían, estos, según sus caprichos moverían las fuerzas naturales y por ende, era bueno tener su favor si se quería sobrevivir, así parten los cultos animistas más primitivos.


Con el paso generaciones, los hombres fueron viendo que durante largos periodos se cumplía un ciclo, según cambiaba el clima de cálido a frío en forma regular, entendieron que había estaciones y que deberían aprovechar esta variación para aprovisionarse cuando la naturaleza diera sus frutos y resguardarse cuando vinieran las épocas crudas. El hombre avanzó paulatinamente de una vida nómade, errando en busca de alimentos a una vida sedentaria, la comprensión de los ciclos anuales les permitió con el paso del tiempo desarrollar la agricultura, sembrando en la epoca correcta, cosechando cuando el fruto estuviera maduro, conservando para la estación fría.


El Sol, brillante ser de las alturas, un espiritu, un dios distante regía la vida de los antiguos, cuando sus rayos eran más intensos llenaba la Tierra de vida, cuando menguaban, venia el invierno y la necesidad de retraerse en torno a una hoguera a espera que volviera a brillar con fuerza.

lunes, 8 de febrero de 2010

Vía Pagana

Este blog ha sido creado para dar a la comunidad pagana material de lectura y discusión en torno a temas de espiritualidad y ocultismo con un enfoque de amplio criterio, evitando el fanatismo y la superstición.

Esperamos sea de su gusto.